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En medio de la tensión entre Israel e Irán y la incertidumbre sobre un posible ataque de Estados Unidos a Teherán, destaca el avión B-2 Spirit por ser el único capaz de transportar la bomba antibúnker de EE.UU. La 'Massive Ordnance Penetrator', MOP GBU-57, puede destruir instalaciones nucleares subterráneas en Irán. Este avión invisible a radares puede penetrar defensas antiaéreas y desplegar armas convencionales y nucleares.
En medio de la escalada entre Israel e Irán, y ante la ambigüedad de EE.UU respecto a un eventual ataque militar contra Teherán, el avión B-2 Spirit comienza a cobrar notoriedad por una importante razón: ser el único que puede transportar la bomba antibúnker de EE.UU.
Se trata de la llamada ‘Massive Ordnance Penetrator’ (MOP GBU-57), la cual destaca por su capacidad para destruir las instalaciones nucleares subterráneas de Irán.
De esta manera, si el presidente Donald Trump llegara a ordenar un ataque directo sobre territorio iraní, esta bomba eventualmente podría entrar en acción para así limitar el programa nuclear de la república islámica.
Con un cuerpo de 6 metros de largo y 13,6 toneladas, la bomba debe ser lanzada desde una distancia de unos 15 kilómetros de altura, pudiendo perforar montañas y penetrar más de 60 metros antes de explotar.
Un bombardero invisible capaz de penetrar defensas antiaéreas
El B-2 Spirit es un bombardero estratégico polivalente desarrollado en Estados Unidos por Northrop Corporation. Cuenta con tecnología furtiva de baja visibilidad, lo que le permite ser invisible ante los radares enemigos.
Su peculiar diseño lo convierte en un avión que puede penetrar defensas antiaéreas para desplegar armas tanto convencionales como nucleares.
Tras realizar su primer vuelo el 17 de julio de 1989, se convirtió en el principal bombardero de ataque de largo alcance de EE.UU. “Representó un gran avance tecnológico y para la superioridad aérea estadounidense. Incluso hoy, el B-2 sigue ofreciendo un gran rendimiento”, detalla Northrop Grumman.
A lo largo de los años, el B-2 ha entrado en territorio enemigo en apoyo de la Operación Fuerza Aliada (Serbia), la Operación Libertad Duradera (Afganistán) y la Operación Libertad Iraquí (Irak), además de cumplir con misiones en Libia en apoyo de la Operación Amanecer de la Odisea.
La aeronave mide 21 metros de largo, 5 metros de alto y tiene una envergadura de 52 metros, la mitad de la longitud de un campo de fútbol.
Puede alcanzar los 972 km/h mientras que su techo operativo de vuelo llega a los 15.200 metros, quedando fuera del alcance de varios misiles antiaéreos.
Tiene una autonomía de vuelo de 11.100 kilómetros sin reabastecimiento de combustible, estando habilitado para realizar misiones a grandes altitudes, lo que le da una gran versatilidad.
“Puede llegar a cualquier punto del mundo en cuestión de horas”, señala el conglomerado de empresas aeroespaciales estadounidenses en su página oficial.
Sus características lo han convertido además en uno de los aviones preferidos por Hollywood, apareciendo en reconocidas películas como “Independence Day”, “Armageddon”, “Iron Man 2”, “Cloverfield”, “Airplanes” y “Rampage”, entre otras.
Recientemente EE.UU desplegó unidades del B-2 en Camp Thunder Bay, en la pequeña isla de Diego García, en el Océano Índico. De acuerdo a imágenes satelitales analizadas por The Associated Press, se trata de al menos seis unidades con capacidad nuclear.
Esta acción se registró en plena campaña de ataques aéreos de EE.UU contra los rebeldes hutíes de Yemen. Cabe señalar que la base de Diego García tiene una ubicación estratégica: está situada al sur de India y a una distancia de ataque de Irán.
